Feria

Sevilla, bella y diversa

La Hacienda Santa Ana, arquitectónicamente diseñada sobre el modelo romano de casa cerrada y fortificada, fue construida en el año 1861 y destinada principalmente al cultivo del olivar. En base al modelo arquitectónico clásico, posee casa noble, o señorío, salones sociales, capilla, cuadras, viviendas para el servicio, o gañanías, jardines y patio de labor con naranjos.

La plaza de toros data de 1870, fue inaugurada el 20 de junio de 1878 y reconstruida en 1942. El antiguo coso de la Sierra Morenas sevillana está construido en mampostería, ladrillo y madera, y tiene forma poligonal. El ruedo tiene un diámetro de unos 40 m y cuenta con cuatro chiqueros, una caballeriza, un corral para el ganado de lidia, una enfermería y una capilla.

La localidad sevillana de El Real de la Jara muestra orgullosa su mejor perfil cuando hablamos de arquitectura al servicio de la comunidad. En la plaza de toros municipal se utilizaron materiales tales como piedras de cantera del siglo XIX.

Inaugurada el 22 de junio de 1905, es una de las más antiguas de la provincia de Sevilla. Tiene capacidad para 2 380 personas. Por ella han desfilado figuras del toreo como Curro Romero, Paquirri, Pepe Luis Vázquez y los hermanos Peralta, entre otros.

Inaugurada el 28 de agosto de 1994, cuenta con un aforo de 1 000 localidades. Originalmente solo contaba con medio graderío y en el año 2010 se le añadió la otra mitad.

Está preparada para novilladas y rejoneo, aunque también se realizan espectáculos de hípica y suelta de vaquillas.

Catalogada de tercera categoría, la plaza de toros de Alcalá del Río data de 1950 y sustituyó a la tradicional plaza de carros. 

La nueva plaza de Morón de la Frontera, propiedad del empresario y ganadero Manuel Morilla, fue inaugurada el 10 de marzo de 2001 por Manuel Benítez El Cordobés, Enrique Ponce y El Juli. Comenzó a construirse el 19 de octubre de 2000. El presupuesto ascendió a 240 millones de pesetas.