Feria

Sevilla, bella y diversa

Obra de gran interés, aunque lamentablemente sólo conserva el recinto exterior, incluida una portada que perteneció según la tradición al desaparecido convento de San Francisco. Esta responde a un sencillo trazado renacentista atribuido al propio Hernán Ruiz II, que intervino en el diseño de la torre parroquial.

La Carlina tiene una historia novelesca. Lo que fuera un humilde cortijo o casa de campo con una viña alrededor, a las afueras de Constantina, cambió radicalmente a principios de los años 50, cuando fue comprada por Léon Degrelle (1906-1994).

Declarado Bien de Interés Cultural en el año 1985, está constatado el origen islámico (almohade en concreto) de la llamada Puerta del Arquillo. Esta estructura estaría relacionada militarmente con el resto de la cerca islámica, así como con la cercana mota del Alcázar.

Aunque forma parte de una edificación destinada a vivienda, según se deduce de la continuidad de algunos sillares, en la actualidad se puede interpretar como si fuera una edificación independiente.

La iglesia de la Merced se construyó en su actual ubicación en 1650, aunque sufrió una profunda remodelación en la segunda mitad del siglo XVIII. Los frailes llegaron a Osuna en 1609 y se instalaron inicialmente en la ermita de Santa Ana, localizada en las afueras de la ciudad.

Una de las calles más maravillosas de Osuna es esta cuesta situada a los pies de la barroca torre de la Merced.

La Puerta del Tiro era la puerta principal de entrada al alcázar de la ciudad musulmana. A través de ella se permitía la comunicación directa entre ambos recintos, la alcazaba y la medina, pero la obra islámica fue muy transformada al convertirse en vía de acceso a la zona palatina en el periodo ducal.