Feria

Sevilla, bella y diversa

Edificio civil de arquitectura popular andaluza del siglo XV y con fachada dieciochesca, en la que encontramos sobre la puerta principal un azulejo con la giralda escoltada por jarras de azucenas, escudo del cabildo y reflejo de la antigua pertenencia de esta casa a la Iglesia. Conocida como Casa de la Cilla, término que proviene del latín y significa desván o granero.

Este edificio es uno de los más característicos de la arquitectura local urbana del siglo XVIII y típica casa señorial barroca. Fue realizada por Alonso Ruiz Florindo, de quien se dice que modernizó y depuró el estilo de su padre.

Hay poca documentación relativa a las obras de Juan Ruiz Florindo, por lo que la mayoría se han identificado por las características más afines de este alarife. Esta casa fue realizada entre 1730 y 1740 para la familia Fernández de Peñaranda.

Recuerdo de un bello palacete del siglo XVIII. Lo único que queda de esta casa es una parte de la fachada y la portada que daba acceso al mismo. Conserva un airoso balcón mirador de delicada forja barroca que aprovecha su situación en la esquina misma de la confluencia de dos calles.

Perteneció a unos caballeros de apellido Pareja y está considerado como un edificio tradicional ecijano típico del siglo XVII-XVIII. Tras haber sufrido varias modificaciones a lo largo del tiempo, con la finalidad ser reutilizado para varios usos, ha sido recientemente restaurado.

El Palacio de los marqueses de Benamejí que actualmente alberga el Museo Histórico Municipal de Écija, es una de las obras fundamentales de la arquitectura civil dieciochesca de la ciudad, pues define de manera precisa la concepción particular  que del estilo barroco se tiene en la Baja An

A la iglesia, de una sola nave cubierta con una interesante armadura tipo mudéjar datada en 1596, se accede a través de una portada ubicada en el muro derecho, donde donde se sitúa una espadaña tipo campanario angular.